Revista Latina de Comunicación Social 30 – junio de 2000 |
Edita: LAboratorio de Tecnologías de la Información y Nuevos Análisis de Comunicación Social |
Retos en el diseño de periódicos en Internet (1.960 palabras – 5 páginas) Dra. María Ángeles Cabrera González © Profesora de la Facultad de Ciencias de la Información Universidad de Málaga España A partir de la escasez de estudios que profundicen en las auténticas posibilidades y limitaciones de la información a través de Internet, se hace cada vez más necesario el seguimiento de la evolución de los periódicos en este nuevo medio de comunicación. El desarrollo y los continuos avances tecnológicos afectan al modo en que se presenta visualmente la información en línea. En la adaptación al progresivo cambio, los periódicos tienden a introducir novedades que afectan decisivamente a la percepción visual de la información. Esas transformaciones visuales se realizan periódicamente, al menos una vez al año. El frecuente cambio de la imagen visual de los periódicos en Internet obliga a la redefinición de los principios básicos del diseño en línea. Para su acierto, esos cánones visuales deben responder a las necesidades de los lectores o receptores de la información. De otra, aprovechar las cualidades expresivas que el propio medio ofrece. La difícil conjunción de estos objetivos supone el conocimiento previo del medio y sus posibilidades de comunicación visual. En la actualidad conviven en Internet tres modelos de diseño de periódicos que responden a los distintos grados de adaptación a las necesidades del lector y a las posibilidades de la red. Estos modelos -el de reproducción facsimilar del periódico papel, el del periódico adaptado y el del periódico propiamente digital- tienden a ser superados por el modelo que podríamos denominar multimedia. Del nuevo modelo se espera, que al igual que la tecnología debe hallar solución a algunas de sus limitaciones actuales -como el ancho de red, la velocidad en la transmisión de datos, etc.-, el diseño multimedia de los periódicos en línea propicie la madurez visual hacia formas de presentación de la información exclusivas del nuevo medio, capaces de dotar al mismo de personalidad propia, separándolo así de los medios de comunicación tradicionales: prensa, radio y televisión. Los periódicos en Internet se encuentran, por tanto, con la posibilidad de enriquecerse de las ventajas de la radio y la televisión, a la vez que ofrecen sus contenidos de forma más completa y atractiva desde el punto de vista visual. El diseño de la información debe contribuir a todo ello cumpliendo su misión de estar en función de los contenidos: un reto que se traduce en decisiones como las del aprovechamiento de la interactividad, la apuesta por la claridad, la jerarquía en el uso de los elementos visuales, la imagen en movimiento y el sonido, la navegación, búsqueda y personalización de los contenidos. Retos en el diseño de periódicos en Internet Ante la novedad de la materia y a la rapidez con que avanza la tecnología, se hace necesaria la profundización en los cambios y evoluciones que la información periodística ha experimentado en Internet en los últimos cinco años. Desde su aparición, Internet se ha convertido en un fenómeno que afecta a la sociedad y al mundo de la comunicación hasta límites insospechados, por lo que influye en sectores sociales tan variados como el periodístico, el empresarial, el sociológico, el político, el económico y el cultural. Los continuos cambios en esta materia aumentan la necesidad de estudiar y profundizar sobre las auténticas posibilidades y limitaciones del nuevo medio periodístico que se denomina de información en línea. La observación de los 2.284 periódicos presentes en Internet nos permite diferenciar los siguientes modelos de reproducción gráfica de la información: En primer lugar, podemos destacar el modelo o sistema más primitivo, el facsimilar; correspondiente al momento del nacimiento de la mayoría de los periódicos en Internet o, a lo sumo al año 1992: se trata de una reproducción facsimilar de la página del periódico mediante la utilización del scaner. Un segundo modelo más avanzado, el adaptado; sería el de aquellos periódicos que sin aplicar todos los recursos de interactividad que ofrece el propio medio, son capaces de crear elementos gráficos diferentes a los que se utilizan en su versión en papel. Por ejemplo, el diseño de la cabecera, introducción de hipertextos o enlaces,... etc. En tercer lugar, destacaría el modelo gráfico más evolucionado o digital; creado expresamente para la edición en línea. El modelo digital goza de texto y diseño exclusivos para su edición, y empieza a utilizar recursos expresivos y multimediales. Finalmente, sería el modelo multimedia el ideal todavía no alcanzado por la prensa en línea actual. Por tanto, son los modelos digitales los que hoy por hoy, permiten conocer las características -cada vez más presentes y extendidas en las ediciones de los periódicos en línea- propias del nuevo medio. Hacia el buen diseño La presencia o ausencia de estas características permite hablar de periódicos en línea mejor o peor diseñados. Estas son:
El conocimiento de las cualidades del nuevo medio es una de las claves para la utilización correcta y acertada (eficaz) de los elementos visuales en la prensa en línea. Sobre el estado actual de la cuestión se pueden realizar las siguientes afirmaciones:
Dependencia de la tecnología Con respecto a la evolución tecnológica y visual de la prensa hasta su incorporación a Internet:
Otras asignaturas pendientes Todavía no se han aplicado a este tipo de información periodística todos los recursos visuales que permite la tecnología tales como: el uso adecuado del color, la fotografía, las posibilidades de enlace (en cabecera, pies de foto, promos o ventanas, etc.), los recursos multimedia aplicables a los contenidos, el aprovechamiento de los espacios en blanco, la variedad de tipografía legible en la pantalla.
Hacia la consolidación del medio El nuevo medio tiende a consolidarse, de hecho, se puede afirmar que:
A partir de las conclusiones obtenidas, podrán ponerse en práctica nuevas investigaciones que amplíen los conocimientos en aquellos campos pendientes de abordar. * Trabajo presentado en la II Bienal de la Comunicación, celebrada en la Universidad de Cartagena (Colombia), en mayo de 1999 |
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